Magda Díaz
Cuernavaca, Morelos; 8 de agosto de 2019. Agremiados a la unión de comerciantes del ramo de la carne protagonizaron una manifestación en las inmediaciones del Ayuntamiento de esta ciudad para solicitar al presidente municipal que se haga lo conducente para que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) retiré los dos sellos de clausura que, a inicios del mes de junio, colocó en las en un área del rastro municipal y mediante los cuales se prohíbe el sacrificó de vacas, becerros y toros por condiciones de insalubridad.
En entrevista, el representante de los comerciantes, Rafael Cepeda Aguilar, declaró que desde hace 60 días, quienes se dedican a este gremio han sido severamente castigados por el cierre. Por ello, exigieron al edil Antonio Villalobos Adán que se hagan las labores de remediación necesarias en el rastro y con ello se pueda reactivar el sacrificio de más de 50 cabezas de ganado vacuno que a diariamente se efectuaba en la capital.
El representante de los introductores de ganado, comentó que las 500 familias que dependen del sacrificio de reses han tenido pérdidas de 200 mil pesos.
“Hace 60 días que Cuernavaca está consumiendo carne que no se sabe cuál es su procedencia, no se certifica, no se revisa, y la gente está comiendo carne que no sabemos de dónde viene y eso pone en riesgo a la salud pública. Hacemos responsable de esta situación al presidente municipal, como no hay lugar para sacrificar animales, entonces aquí vamos a sacrificar a los animalitos, hacemos un llamado a la gente para que esté muy atenta y muy alerta, de que revisen muy bien dónde y cómo compran la carne”, refirió Rafael Cepeda.
A manera de presionar, por algunos instantes, los introductores amagaron con sacrificar tres cabezas de ganado porcino y uno de bovino, en las inmediaciones de la sede del ayuntamiento.
