En entrevista, afuera del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Enrique Paredes Sotelo indicó que el gremio de abogados está severamente afectado por la pandemia, tras el cierre de los juzgados desde el 23 de marzo, porque ya no cuentan con ingresos para subsistir y la mayoría debe la renta de sus despachos, luz, agua, nómina y el banco ya les notificó que deben pagar porque el plazo que dio ya se venció y no tienen dinero ante la falta de trabajo.
“Lo que estamos pidiendo es que se dé ese apoyo en créditos del Fondo Morelos y nos regresen un poco de lo que hemos pagado, mediante nuestros impuestos, con un crédito a bajo interés y un plazo de pago a seis meses o un año, no será ningún dinero perdido”, aseguró.
Lamentó que en el mes de agosto los tribunales reanudarán a puerta cerrada y por lo tanto, tampoco generarán ingresos y el banco ya no les quiere prestar porque están en el buró de crédito.
Señaló que si no reciben ese apoyo del gobierno, muchos despachos ya no podrán reabrir ante las deudas que enfrentan.