Por Silvia Lozano Venegas
Cuernavaca, Morelos; 20 de julio de 2018. La Secretaría de Cultura del estado de Morelos destruyó el cuexcomate que estaba en la entrada del Jardín Borda en Cuernavaca, porque a alguien no le gustó, denunció Emilio Barranco, artesano de Chalcatzingo.
El artesano, que se dedica a la construcción y reparación de cuexcomates, relató a Conurbados que, hace como dos años, vio en la basura al cuexcomate que estaba en la entrada del Jardín Borda y que medía aproximadamente un metro con 80 centímetros:
«Me dio mucha tristeza cuando lo vi arrumbado en una esquina, otros artesanos y yo lo quisimos llevar para restaurarlo y aunque le dijimos al encargado de obra de la remodelación, nos dijo que no se podía porque lo iban a echar a la basura».
También explicó que él y sus amigos insistieron en llevarse los pedazos para restaurarlo y ponerlo en otro sitio, pero que no les permitieron que se lo llevaran.
«El cuexcomate que estaba en el Borda valía como unos veinticinco mil pesos, pero que importante no es el valor económico, sino lo que representa, porque es una ‘artesanía típica de Morelos, como lo es el chinelo’”, explicó Emilio Barranco.
Víctor Manuel Alemán, director del Centro Cultural Jardín Borda, confirmó que sí estaba el cuexcomate en la entrada del Borda, pero que cuando se restauró se quitó porque estaba mal ubicado y no tenía el mantenimiento que se le debe de dar a ese tipo de artesanías:
“Porque está a la intemperie, la lluvia, los mismos cuexcomates de tamaño natural tienen un proceso de mantenimiento, cambiarle el zacate, las cuarteaduras que sufre el barro y aquí como estaba a la intemperie no teníamos el contacto con los artesanos para hacerle el mantenimiento, se fue deteriorando de manera natural y se retiró”.
A pregunta expresa, de cuánto tiempo estuvo el cuexcomate en el Jardín Borda, el director respondió que no tenía ese dato, pero que se quitó porque estaba en mal estado y porque en el proyecto original de restauración del Jardín Borda no se contempló ese tipo de artesanías.
“Donde si tenemos un cuexcomate es en el Museo de Arte Popular, tenemos uno de metro y medio y otro de seis metros, pero aquí en el Jardín Borda ya no tenemos”, puntualizó.
Sin embargo, el artesano de Chalcatzingo reiteró que cuando lo vieron en la basura, el cuexcomate estaba en buen estado y después, con el otros artesanos intentaron restaurarlo, porque se dañó cuando lo arrumbaron, “pero ya no nos quisimos meter en broncas, porque la orden de quitarlo venía de arriba”, confesó.
El cuexcomate es una artesanía típica de Morelos, que nació en la comunidad de Chalcatzingo del municipio de Jantetelco, que al igual que el chinelo, han dado a conocer a Morelos en otras partes del país y con el apoyo de la Secretaría de Economía pretenden darlo a conocer al mundo.
Emilio Barranco detalló que tiene doce años elaborando cuexcomates de todo tipo de tamaños, que ellos hicieron el que está en la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), junto al edificio de rectoría y ya tiene más de 20 años, que también elaboraron el que está en Acapatzingo y el que estaba en el Jardín Borda.
Indicó que adentro del Palacio de Cortés hay un cuexcomate de gran tamaño, pero desconoce en qué estado está después del sismo del 19 de septiembre, pero que ellos están dispuestos a restaurarlo.
Comentó que esta artesanía sólo se elabora y nació en Chalcatzingo y participan 50 personas que de generación en generación han dado a conocer el cuexcomate en otros estados como Chiapas, Michoacán, donde ha tenido mucho éxito.
La elaboración del cuexcomate dura dos días, o semanas según el tamaño, el proceso consiste en tallar la piedra, “después se sigue uno con la olla de barro, se hacen las gavillas, cada pieza lleva 200 gavillas y se hace la estructura de madera llamado guajarete y después va el techado de zacate amarrado con la fibra de maguey y después el trencillo y el cono; es un trabajo muy elaborado, pero no es tanto el precio sino promover la cultura, porque antes eran los vigilantes del maíz para que no se lo comieran las gallinas y para mantener el grano fresco, porque por el barro, el maíz duraba todo el ciclo para su consumo”.
Restauración del Jardín Borda
Con la restauración del Jardín Borda que inició en el año 2013, se comenzó con la remodelación de las salas de exhibición del centro cultural, la segunda etapa inició en el año 2014 con recursos del Programa de Apoyo a la Infraestructura Cultural de los estados y se comenzaron los trabajos en el año 2015, que contempló la restauración de sus elementos arquitectónicos y la renovación de su infraestructura eléctrica y las siguientes etapas el reequipamiento del Foro del Lago y la rehabilitación del Jardín de las Rosas y el ondulante.
Por lo que alrededor de esa fecha, cuando se restauró el jardín, fue retirado y arrumbado el cuexcomate, porque no estaba contemplado en el proyecto de remodelación, pero en lugar de donarlo o restaurarlo, lo tiraron.
Daños tras el sismo
Con el sismo del pasado 19 de septiembre, el Jardín Borda estuvo cerrado más de un mes, y tras realizar un dictamen, se evaluó que no sufrió daños estructurales, y se determinó que es seguro para los visitantes, que sólo hay unas áreas delimitadas, como la barda que colinda con la calle Álvaro Obregón, que colapsó; el arco de la entrada principal que está apuntalado, pero el director del jardín desconoce cuándo estará listo al 100 por ciento
Sobre las lanchas que antes estaban en el lago principal, dijo que se está haciendo una análisis del agua, porque se tiene la falsa idea de que está sucia, pero que investigadores de la Universidad del estado le han hecho estudios y determinaron que está en buen estado, porque hay fauna, no hay moscos ni nata, por lo que es posible que pronto se reactive.
“Las lanchas estamos en proceso de recuperar el espacio, porque hubo una pequeña fisura tras el sismo y ya no es tan grave como el primer día, que hubo un escurrimiento por el sismo. El 19 había fuga que llegaba a la calle Obregón, fue muy pequeña pero ya no sale agua, por el reacomodo natural de la tierra. Las fuentes no sufrieron daños, además de las restauraciones de cuatro años, no sufrieron ese problema, los arriates, las fuentes sin problema, son contadas las zonas que están afectadas”, destacó.
Por lo que resaltó que con el trabajo que ha realizado la Secretaría de Cultura durante estos años del rescate del Jardín Borda, aseguró que incluso ya regresaron las garzas, abejas y ya crece pasto, porque entra la luz a los árboles, se tiene Jardín Borda para otros 200 años o más.
