Por Silvia Lozano Venegas
Cuernavaca, Morelos; 3 de octubre de 2018. Médicos, enfermeras así como personal administrativo del hospital general «José G. Parres» de Cuernavaca, realizaron un paro de brazos caídos ante la falta de insumos necesarios, por lo que está en riesgo la salud de los pacientes.
Francisco Brito Estévez, coordinador de traumatología y ortopedia del hospital José G. Parres, dijo que decidieron hacer esta protesta porque no cuentan con lo mínimo indispensable para atender a los pacientes, como gasas, alcohol, jeringas, guantes y que incluso desde este lunes se quedaron sin personal de limpieza.
Aclaró que no es un problema reciente, sino que desde el sismo del año pasado, que sufrió daños el hospital, se hizo un hoyo en el área de quirófanos, donde se ve el cielo, de manera literal y no lo repararon.
Denunció que hurtaron equipo médico de alta tecnología y prácticamente el hospital fue saqueado, por el anterior gobierno, por lo que exigieron a las autoridades que quedaron como encargadas que atiendan esto cuanto antes, porque la vida de los pacientes está en riesgo.
El doctor señaló que hay un gran déficit de insumos y con la transición del gobierno todo está detenido.
Reiteró que continuarán con esta protesta de brazos caídos hasta que alguien se haga responsable porque no cuentan con lo básico para atender a la ciudadanía en urgencias, en operaciones y han tenido que pedir a la ciudadanía que compre su material de curación o insumos para su atención o “nos hacemos la coperacha”.
“Estamos trabajando las áreas criticas, de brazos caídos, estamos dando atención con el minino de insumos y si no hay se pide al paciente que lo compre. Hemos vivido esta circunstancia, somos culpables por soportar estas bajezas porque no tenemos lo mínimo indispensable para la atención”, subrayó.
Asimismo, también hizo un llamado para que se cree una comisión interna para que verifique la calidad de cada uno de los insumos que va a proveer a la Secretaría de Salud para que dé el visto bueno y no ocurra lo de hace seis años, que les dieron materiales de muy mala calidad.