Magda Díaz
Cuernavaca, Morelos; 7 de marzo de 2022. Integrantes del colectivo Familias Resilientes Morelos acompañaron a familiares de personas que desaparecieron el año anterior para exigir resultados efectivos a la Fiscalía General del Estado (FGE) en la desaparición de sus consanguíneos, tal es el caso de la señora Claudia Esparza, madre de Jesús Alejandro Guevara Esparza, quien puntualizó que pese a que la fiscalía oriente abrió una carpeta de investigación hasta el momento no se tiene contundencia en la misma y continúan con las interrogantes sobre qué fue lo que pasó con el joven de 21 años de edad que se desempeñaba como chofer.
Claudia Elizabeth Esparza precisó que desde hace casi un año, cuando la fiscalía le tomó muestra de ADN, hasta el momento no se han hecho confrontas genéticas con restos que hayan sido encontrados por las autoridades.
La madre de Jesús comentó que por la falta de resultados inició una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humano; sin embargo, a la fecha y bajo el pretexto de mucha carga de trabajo no se han obtenido resultados efectivos respecto a la desaparición.
“El seis de abril se va a cumplir un año de su desaparición y aún no puedo obtener resultados de las investigaciones; sigo esperando los resultados del ADN para revisar las confrontas y aparte de luchar con nuestro dolor hay que hacerlo con las autoridades, que se limitan a decir que tienen mucho trabajo. La fiscalía me pregunta a mí, quiere que yo le dé las respuestas que ellos deberían de estar buscando y yo lo único que les pido a ellos es que hagan su trabajo. Cada vez que yo voy me dicen que tienen mucho trabajo, que son muchos desparecidos y que no pueden avanzar», expresó Claudia Esparza, quien indicó que hasta el momento no se tiene la sábana de información sobre los mensajes y/o llamadas que su hijo recibió el día de su desaparición.
Finalmente, la madre del joven de 21 años, quien este ocho de marzo cumpliría 22 de años de vida, colocó en el memorial a victimas la fotografía del rostro de su hijo, para posteriormente retirarse a casa en espera de los resultados exigidos.