Silvia Lozano Venegas
Cuernavaca, Morelos; 23 de julio de 2021. El presidente municipal electo de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, consideró que el relleno sanitario de Loma de Mejía no cumple con todos los requisitos de impacto ambiental para mitigar los lixiviados y hoy se abre y tira la basura ahí, por lo que anticipó que dará solución integral a ese tema de la basura una vez que entre en funciones.
Lo anterior, luego de que la administración actual que encabeza Antonio Villalobos Adán afirmó que ese relleno sanitario sí cumple con la ley y por ello se autorizó su operación desde hace un año.
Al respecto, Urióstegui Salgado dijo que ese relleno sanitario “es un tiradero que fue clausurado hace tiempo porque no satisfacía todos los requisitos de impacto ambiental, y el tema de la basura y su disposición final en Cuernavaca es un problema muy complejo que se tendrá que solucionar de la mano de la ciudadanía”.
Manifestó que el municipio necesita un servicio integral de recolección y disposición de desechos sólidos que no cueste tanto al ayuntamiento capitalino.
“Necesitamos trabajar desde la sociedad para producir menos basura, separarla y que la empresa o el mismo ayuntamiento, en caso de que se haga cargo de ese servicio, un día recoja sólidos y otro orgánicos para generar una cadena de producción que disminuya el costo para el ayuntamiento”, aseveró.
De acuerdo con Antonio Villalobos Adán, la reapertura del relleno sanitario de Loma de Mejía generó ahorros al municipio, empero no reveló cifras.
Cabe mencionar que este viernes continuaron las movilizaciones al norte de Cuernavaca, en Subida a Chalma, por vecinos de diversas colonias como Ruiz Cortinez, Lomas de Atzingo y La Mina, que se oponen a la operación del relleno sanitario de Loma de Mejía.
Recordaron que desde hace más de 10 años, los investigadores del CRIM determinaron que ese relleno no cumplía con la norma ambiental, por lo que ante su reactivación hicieron un llamado a la ciudadanía organizada de Cuernavaca a que se sume a sus protestas de manera pacifica para exigir su cierre de manera definitiva y su remediación.